Tanto si es un simple curioso como un amante del vino, venga a conocer a un viticultor apasionado. Le contará la historia de su finca y la de un viñedo milenario, cuyos vinos de Gaillac fueron degustados en las mesas de los condes y reyes de Francia. Entre una visita a la finca y una degustación de vinos, viva un encuentro único y fascinante.