Una casa del siglo XVIII, transmitida de generación en generación
Cerca de una antigua calzada romana, podrá ir a pie o en bicicleta para descubrir los bosques de Sivens o de la Grésigne, o incluso algunas bastidas. En cuanto a las visitas turísticas, los paisajes, las ciudades y los pueblos pintorescos que componen nuestro patrimonio regional nunca le dejarán indiferente, Cordes-sur-Ciel, Puycelsi, Castelnau-de-Montmiral... El viñedo de Gaillac ha sabido realzar su formidable patrimonio.
A lo largo de su ruta, cada viticultor le hablará de sus viñedos, de sus vinos, de su terruño, y le sugerirá los mejores momentos para ir a conocerlo y visitar su bodega o su sala de degustación.
En la planta baja, podrá disfrutar de una sala de televisión, un amplio salón-comedor y una cocina totalmente equipada.
La primera planta está dedicada al descanso con cinco dormitorios, cada uno con su propio cuarto de ducha.
Frente a la casa, a la sombra de los árboles centenarios, la gran mesa invita a reunirse, mientras que la piscina y sus tumbonas invitan a descansar y relajarse. También puede jugar a la pelota en el campo de minifútbol, al tenis de mesa o a la petanca bajo los árboles, mientras los más pequeños disfrutan de la zona de juegos.
- Se proporcionan sábanas y toallas, el servicio de limpieza al final de la estancia es extra.
- El acceso al spa en la reserva está incluido en la estancia, los masajes son extra.